Esta noche no ha parado de llover. Por la mañana ha seguido igual, así que hemos estado esperando un buen rato para ver si amainaba. Como veíamos que iba para largo, no nos ha quedado más remedio que aceptarlo y salir con la lluvia. No es muy agradable empezar el día mojándote pero también es verdad que después de unos kilómetros uno se acostumbra.

Hemos seguido, nuevamente, el canal del Ródano al Rin. Poco a poco vamos subiendo altitud puesto que las esclusas van en sentido ascendente. Además, unos diez kilómetros antes de llegar a Montbéliard, hemos tenido que subir unos buenos repechos que luego hemos disfrutado bajando, eso sí. Muy cerca de esta zona, en las montañas del Jura, se elabora uno de nuestros quesos preferidos: El Comté. Qué lástima que no hayamos pasado por ninguna quesería para degustarlo in situ. Bueno, nos conformamos con el que vamos comprando en los supermercados.

Hemos llegado a Montbéliard a media mañana. Es una ciudad pequeña, sin nada especial salvo un castillo junto al canal. De todas formas, nos encanta llegar a estas pequeños lugares y ver la vida cotidiana de su gente.

Tras hacer un descanso en Montbéliard, hemos seguido el curso del canal. Hemos parado a comer en una pequeña caseta de Valdieu-Lutran.

A partir de ahora entramos en Alsacia. Y justo aquí suponemos que está la divisoria de aguas entre la cuenca del Ródano y del Rin puesto que las esclusas han cambiado de orientación y ahora empiezan a descender. De hecho, en este pueblo, habrá como unas quince esclusas seguidas, ¡menos mal que no vamos en barco!.

Otro de los cambios que vamos observando es el nombre de los pueblos. Desde luego franceses franceses no parecen, y es que esta zona alsaciana ha pertenecido unas veces a Alemania y otras a Francia. De hecho, culturalmente, quizás se parezca más a la Alemania de Baviera que a la Francia que venimos conociendo.


Por suerte, el día ha ido poco a poco mejorando y después de comer ya, prácticamente, no ha llovido. Ahora estamos en Mulhouse, una bonita ciudad con un cierto toque germano. Según hemos leído, la planicie alsaciana es, junto con Perpignan, el sitio de Francia con menor pluviosidad. Esperemos que haga honor a las estadísticas y siga así mañana, aunque las previsiones apuntan lo contrario. Bueno, al menos hemos podido secar la ropa y la tienda.


