Hoy hemos llegado a un pueblo de nombre bastante gracioso, Joselín, pero con dos eses. Aparte del curioso nombre tenemos que decir que es un pueblo precioso, con un castillo impresionante y con casas medievales que parecen sacadas de un cuento. De hecho, según nos íbamos acercando, nos ha venido a la memoria el inicio de Juego de Tronos (los seguidores de la serie lo entenderéis).

Esta ha sido una etapa bastante relajada. En principio porque así lo habíamos previsto pero sobre todo porque ayer nos dimos bastante caña y el cuerpo pedía tierra. ¡Y vaya si le hemos dado tierra!, nos metimos a dormir antes de las diez y hemos amanecido a las nueve y pico…

La mañana ha estado lluviosa y un poco fresquita pero a lo largo del día se ha despejado y ahora mismo luce un sol radiante. Dicen que por aquí el tiempo es así de variable así que no sabemos que nos encontraremos mañana.

Tras dejar el camping hemos dado unas últimas vueltas por Redon y hemos tomado un cafecito en una terraza. Hemos emprendido la marcha retomando el canal y con el objetivo de comer en Malestroit.

Antes de llegar a nuestros destinos no conocemos de ellos nada más que el nombre que vemos en el mapa. Podríamos informarnos antes para ir preparados y a sabiendas de lo que nos vamos a encontrar pero en realidad lo que más nos gusta son las sorpresas del camino y aquí son muy frecuentes. Malestroit es un pueblo precioso de casas medievales (en el mismo estilo que Josselin aunque más pequeño). La sensación de llegar a un lugar y sorprenderte con lo que te encuentras es el mejor premio al esfuerzo del camino.

Hemos comido en un restaurante de la plaza del pueblo (la Plaza Mayor podríamos decir). Hemos degustado los productos de la tierra, las galettes, los crepes, la sidra y la coca cola, bueno la bretón cola (que en realidad se llama Breizh Cola). ¡La sidra ha sido todo un descubrimiento!, no es como la asturiana, esta tiene un poco de aguja y un sabor más dulzón (y no hay que hacer malabarismos para tomártela, de hecho tienen grifos, lo cual se agradece).

Tras el maravilloso festín de la comida (hay que ver cómo se disfruta de la comida después del ejercicio) hemos continuado canal adelante. Este tramo nos ha parecido más bonito que el de ayer, se ve como más frondoso, predominan las hayas, losacebos…y de vez en cuando aparecen pueblecitos con mucho encanto.

Además las esclusas las tienen preciosas de flores, parece que hacen algún concurso para ver cual está más florida.

Bueno, y desde el Camping de Josselin, después de un buen baño en la piscina y con una tarde preciosa nos vamos despidiendo. Mañana, por lo visto, nos esperan las primeras cuestas del último tramo de la ruta. Mañana tendremos que desayunar un poco más por si acaso.